La búsqueda de José Antonio Martínez, desaparecido la semana pasada cuando realizaba una ruta de montaña, continúa sin resultados y con dificultades por culpa de la nieve y el hielo en las zonas de cumbre de las sierras de Béjar y Candelario.
Tanto es así, que el Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil, encargado de coordinar el dispositivo, aconsejó ayer a los voluntarios civiles que no salieran a buscar debido a las malas condiciones.
José Antonio, que mide 1,80 y vestía un anorak rojo, salió el 29 de diciembre al monte con la idea de hacer una ruta entre la plataforma del Travieso y el pico Calvitero, a 2.399 metros de altura. Sobre las 20:42, sus familiares y amigos avisaron al 112 de que aún no había regresado y se puso en marcha el dispositivo de búsqueda, en el que están participando una veintena de voluntarios, entre los que se encuentra la esposa del montañero, Mercedes, y otros 20 guardias civiles.
Los equipos de rescate piensan que el montañero barcelonés pudo despistarse por la niebla y bajar por la vertiente de Ávila en vez de la de Salamanca, desde la que salió.
El yerno del desaparecido, Sergio de la Peña, ha comentado a La Gaceta de Salamanca que recibieron un audio de José Antonio, informándoles de que empezaba la ruta y no han tenido más noticias desde entonces. Además los mensajes de Whatsapp le llegaron hasta las tres y media de la tarde del día 29. Otro que le enviaron a las seis ya no lo recibió.
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