La Policía Municipal de Ponferrada tuvo un fin de semana ocupado, realizando diversas intervenciones y aplicando sanciones en la ciudad. Uno de los incidentes destacados fue la denuncia de una persona por tener a sus perros sueltos en la calzada, una acción que representaba un peligro para la circulación y la seguridad vial.
Además de esta denuncia, se presentaron otras por diferentes infracciones, como fumar dentro de un establecimiento, no respetar el horario de cierre y exceder los niveles de ruido permitidos. Estas medidas buscan mantener el orden y la convivencia en la ciudad.
Los efectivos policiales también se enfrentaron a cuatro incidentes sanitarios durante el fin de semana. Uno de ellos involucró a una persona de 40 años que sufrió un ataque de epilepsia y se desvaneció en la calle. La rápida intervención de la policía permitió proporcionar asistencia en el lugar sin necesidad de trasladar al hospital al afectado.
Además, se brindó atención a un ciudadano de 87 años y otro de 16 años, ambos por mareos y síncope respectivamente. Afortunadamente, ninguno de ellos requirió ser trasladado al centro hospitalario.
A pesar de la actividad policial, se informó que no se produjeron accidentes durante el fin de semana y que los controles de alcoholemia realizados arrojaron resultados negativos en los 16 casos examinados. Por último, se llevaron a cabo 34 denuncias de tráfico y se prestaron 8 servicios de grúa, contribuyendo así a mantener la seguridad y el orden en las vías de la ciudad.
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